¿Se te fue la mano con la cantidad de gambas? No pasa nada, ya tienes los tropezones perfectos para esta exquisitas croquetas.
Vierte el AOVE en una sartén y cocina la berenjena en dados y las gambas picadas. Añade el brandy y reserva.
Derrite la mantequilla en la misma sartén y añade la cebolla picada. Deja pochar y añade lo reservado anteriormente.
Mezcla y añade la harina, la leche (poco a poco), sal, pimienta y deja enfriar en un recipiente.
Da forma a la masa y rebózalas (primero en pan rallado, luego en huevo batido y, de nuevo, en pan).
Fríelas a fuego alto y ¡a comer!